viernes, 29 de abril de 2011

Disco del mes de febrero

Pido perdón por mi retraso pero entre una cosa y otra me ha sido imposible encontrar un hueco de calidad para continuar mi seguimiento musical. Esto no significa que no haya estado escuchando música, creo que es lo único que he hecho.
Sin más dilación, mi elección para disco del mes de febrero es Beast de Devildriver.  Aunque reconozco que no es su mejor obra, si es una en la que más rabia han depositado.  El nombre de la bestia es sin duda una elección fabulosa, ya que se trata de más de cuarenta minutos de rabia descontrolada,  un caos organizado por la enorme capacidad instrumental que tiene el quinteto de Santa Barbara.          
       
Los riffs son un taladro que te engancha sin más, necesitas volver a escuchar los temas una y otra vez y en cada nueva escucha encuentras un detalle nuevo, dándote cuenta de que son capaces de rizar el rizo algo que hoy en día, con tantos grupos similares, es un lujazo enorme.
Me cuesta decantarme por un tema que defina la esencia del disco en sí, ya que los 12 temas conforman un esqueleto perfectamente confeccionado, da la sensación de que si falta uno de ellos el disco pierde una parte esencial del mismo. Asique realizaré un viaje por cada uno de ellos para orientar al oyente bajo mi humilde punto de vista y escaso conocimiento de la materia.
El disco arranca con un Dead to rights que sirve de entrante para prepárate para una comida difícil de digerir, es un tema rápido, contundente y sobretodo cargado de energía. Continua con un Bring the fight, que sigue la línea del anterior, pero con algo menos de intensidad, pero con una letra con mucha intención, el tercer tema Hardened, empieza con una guitarreo muy diferente pero con mucha personalidad en este tema vuelve aumentar tanto la violencia de la percusión como los riffs y la velocidad de las letras uno de mis temas favoritos, de esos que la gente no sabe apreciar y que te toman por loco. El cuarto tema Shitlist, es un tema de contraste y da cierta sensación de bipolaridad, empieza de tal forma que puede parecer que es un descanso de tanta rabia, pero lejos de eso la violencia aumenta paulatinamente quedando muy artística, la parte central del track es una demostración de la capacidad vocal de Dez Farfara, otro tema que me hace dudar entre mi favorito definitivo.  El quinto Talon outs, no tiene nada diferente de los otros sigue en la misma línea del disco pero con un ritmillo como de melodía de peli de egipcios que engancha. You make me sick, es el tema para llegar al zenit del disco, un tema muy rápido y muy ruidoso instrumentalmente hablando, parece una batalla entre las voces guturales y los instrumentos, un lujo que después de 6 temas todavía sigan con ganas de más. Coldblooded, es algo más lento que sus antecesores, pero no mucho más, tiene riffs atronadores y sobretodo un pseudo estribillo bélico que te enamora. Blur es el octavo temón, un trallazo a la vieja usanza arranca con un grito ascendente de la voz de Farfara, en la que asume el liderazgo del tema desde su inicio hasta el final. La novena es para The Blame game, parece sin duda la continuación perfecta del tema anterior tanto que parece que el tema aún no ha acabado, mucho más instrumental y todavía sin bajar el nivel de agresividad. Black soul choir, tiene un comienzo algo desconcertante sin antes hablábamos de un tema con tientes egipcios este tiene un sonidillo medio árabe que conjunto con la voz del cantante adquiere un ritmo pegadizo y muy fresco en un disco tan oscuro, otro de mis temas favoritos. Crowns of creations, es una vuelta a la más pura mala leche directo, agresivo, rápido y muy muy cruel. El broche final lo pone Lend myself to the night, donde el grupo impone la ley de reventar o morir, es difícil encontrar un grupo que cierre un disco a más intensidad que con la que empezó y sobre todo después de tanto recorrido.

Para finalizar el análisis del disco es necesario hablar de la portada, muy criticada por otros y venerada por otros tantos en los que me incluyo. La selección de los colores, ese purpura brillante combinado con esas letras liquidas en ese verde metálico son una pasada, es una portada sencilla, atractiva y con muchísima personalidad, bajo mi punto de vista está a la altura de este discazo.